El capítulo 532 de La Promesa está cargado de tensión y revelaciones impactantes. La crisis económica golpea más fuerte que nunca al Palacio, afectando tanto a la familia Luján como a los sirvientes. Sin embargo, la verdadera tormenta se desata con la llegada de Ramona, una presencia que amenaza con sacar a la luz los oscuros secretos de Cruz.
La escasez y el descontento crecen en la cocina
Las dificultades económicas se sienten en cada rincón del palacio. Los suministros escasean y las raciones de comida se reducen drásticamente. Lo que antes era un hogar de abundancia ahora se convierte en un lugar de privaciones, afectando el ánimo de los sirvientes. María Fernández intenta mantener el optimismo entre sus compañeros, pero la tensión es palpable y el descontento crece.
Por otro lado, Santos recibe una noticia que lo llena de esperanza: su madre, Ana, ha conseguido empleo en la panadería de los Luján. Después de años de sufrimiento y separación, la posibilidad de reconstruir su relación lo llena de ilusión. Sin embargo, no todos comparten su entusiasmo.
Pía, consumida por los celos y la inseguridad
Para Pía, la llegada de Ana representa una amenaza. La posibilidad de que Ricardo, su esposo, vuelva a sentir algo por su antiguo amor la atormenta. Aunque Ricardo le asegura que su corazón solo le pertenece a ella, los miedos de Pía crecen. El regreso de Ana no solo remueve sentimientos del pasado, sino que también aviva sus inseguridades.
Mientras tanto, Rómulo observa la situación con recelo. La repentina aparición de Ana lo hace sospechar que hay algo más detrás de su regreso. Determinado a obtener respuestas, la confronta directamente. Aunque Ana insiste en que solo busca reencontrarse con su hijo, Rómulo no está convencido y sigue investigando.
María Fernández y su lucha contra las sombras de su mente
Otro drama se desarrolla en paralelo: María Fernández está convencida de que está poseída. Su fe inquebrantable la lleva a creer que una fuerza maligna la acecha, afectando su estado mental y su desempeño en la cocina. Aunque Petra y otros sirvientes se burlan de ella, Samuel y Catalina deciden ayudarla.
Samuel, con su sabiduría, intenta hacerle ver que el miedo es su verdadero enemigo. Catalina, por su parte, le ofrece consejos basados en las enseñanzas de su madre. Con el apoyo de ambos, María comienza a recuperar la calma, aunque algo inesperado ocurre: su admiración por Samuel se transforma en sentimientos más profundos.
Cruz y Petra traman contra Ramona, pero Jana no lo permitirá
Pero el verdadero conflicto de este episodio se centra en Ramona. Su llegada al palacio enciende las alarmas de Cruz y Petra, quienes ven en ella una amenaza. Ramona conoce la verdad sobre el pasado de La Promesa, y si habla, los secretos más oscuros de Cruz podrían salir a la luz.
Desesperada, la marquesa planea deshacerse de ella lo antes posible. Sin embargo, Jana no está dispuesta a permitirlo. Para ella, Ramona es la clave para descubrir qué ocurrió realmente con su madre, Dolores. Gracias a los documentos y objetos que ha encontrado en la habitación secreta, sabe que la historia que le han contado no es la verdad.
¿Logrará Cruz expulsar a Ramona antes de que hable? ¿O será Jana quien finalmente descubra la verdad sobre su madre? La tensión alcanza su punto máximo en La Promesa, con giros que prometen cambiar el destino del palacio para siempre.