En el capítulo 279 de Sueños de Libertad, Marta y Fina protagonizan un momento cargado de emoción y tensión. En una conversación crucial, Fina le revela a Marta una dolorosa verdad: “Créame, nunca quise hacerle daño a la niña”. Con estas palabras, Fina intenta explicar sus acciones pasadas, pero la carga de culpa y arrepentimiento la invade. Marta, aunque profundamente afectada, no puede evitar sentir desconfianza, ya que las palabras de Fina no logran borrar el dolor causado.
La relación entre ambas mujeres llega a un punto crítico, ya que Marta se enfrenta a la difícil decisión de perdonar o no a Fina. La revelación de Fina abre una serie de preguntas sobre sus verdaderas intenciones y si su arrepentimiento es genuino. A pesar de su dolor, Marta escucha atentamente, pero el peso de lo sucedido no se puede superar fácilmente. La situación se complica aún más por las circunstancias que las rodean, lo que convierte este intercambio en un momento clave en la trama.
Este capítulo pone en evidencia las complejidades emocionales de los personajes, mostrando cómo el arrepentimiento, el amor y la traición se entrelazan. Sueños de Libertad eleva la tensión al máximo, dejando a los espectadores expectantes sobre si Marta finalmente podrá perdonar a Fina o si la herida será demasiado profunda para sanarla.