El capítulo 573 de La Promesa promete sacudir las emociones de los espectadores con un giro tan inesperado como desgarrador. El alma de Curro, marcada por la pérdida y la rabia, ya no puede soportar más silencio. En su incansable búsqueda de justicia por la muerte de Jana, toma una decisión que impacta a todos en el palacio: desenterrar su cuerpo. Pero no lo hace solo. Para lograr su cometido, arrastra a Pía, su amor y confidente, a un abismo emocional del que quizás no haya retorno.
Pía queda en shock. Para ella, la idea de profanar la tumba de Jana roza lo impensable. ¿Qué podría justificar un acto tan extremo? ¿Realmente cree Curro que encontrará nuevas pistas entre huesos y tierra? La moral de Pía se tambalea ante lo que considera una locura, pero el dolor en los ojos de Curro y su férrea determinación la obligan a replanteárselo todo. ¿Vale más el descanso eterno de Jana o la posibilidad de desenmascarar al verdadero culpable?
Mientras tanto, el drama no da tregua en el palacio. Alonso encuentra consuelo en los brazos de Leocadia, despertando la ira de Lorenzo, que ve en esta cercanía una traición a las normas sociales. Por su parte, Ana, ahora reconocida como heroína tras salvar a Dieguito, se enfrenta cara a cara con Petra, reviviendo tensiones enterradas del pasado. Las fricciones entre Simona y Antoñito crecen, mientras Lope intenta mantener la armonía con palabras de apoyo y esperanza.
En medio de esta tormenta emocional, la salud de Catalina se vuelve motivo de preocupación general. Su fragilidad física contrasta con la fortaleza con la que ha liderado la gestión de las tierras, junto a Martina. A pesar de los esfuerzos de Manuel por buscar soluciones, la incertidumbre se instala entre quienes la rodean, transformando cada conversación en un ejercicio de contención y angustia.
Adriano, por su parte, intenta reavivar la llama con Catalina, pero encuentra en Martina un muro infranqueable. El pasado y las heridas mal cerradas son barreras que parecen imposibles de superar. Y mientras tanto, María Fernández decide marcharse de La Promesa, rompiendo el corazón de Samuel, el sacerdote que la ve como mucho más que una feligresa perdida. Entre oraciones y súplicas, intenta hacerla recapacitar, recordándole que aún puede encontrar un refugio donde sanar.
Pero el verdadero corazón del episodio late bajo tierra. Con el cielo encapotado y la tensión en el aire, Curro se prepara para exhumar a Jana, convencido de que en su tumba yace una verdad que debe salir a la luz. Pía, desgarrada entre el amor y el horror, le acompaña. ¿Será este el paso que finalmente les libere del pasado o el comienzo de una nueva pesadilla?
El miércoles 9 de abril, La Promesa alcanza uno de sus momentos más intensos. Un episodio imperdible que redefine la línea entre la justicia y la desesperación.