En el capítulo 610 de La Promesa, previsto para emitirse el jueves 5 de junio, se desarrollarán tensos y dramáticos acontecimientos que marcarán un giro decisivo en la trama.
Tras los sucesos del episodio anterior, Curro descubre que su madre, Eugenia, ha abandonado la finca para asistir al bautizo de los hijos de Catalina y Adriano. Lo más alarmante es que ha salido armada, llevándose consigo una pistola escondida por el Capitán en un cajón.
La situación se descontrola cuando Eugenia irrumpe en el bautizo y, en un momento de gran tensión, termina disparando a Adriano, quien intentaba calmarla. La herida es grave y la enfermera Emilia recomienda extrema precaución al tratarlo.
Pero el horror no termina ahí: en medio del caos, desaparece el bebé Andrés, y pronto Catalina se da cuenta de que Eugenia ha huido con él en brazos. Aterrada, exige respuestas a Curro, a quien responsabiliza por no vigilar a su madre como prometió.
Mientras tanto, Eugenia se encierra en el torreón con el bebé y amenaza con lanzarse al vacío. Será Curro quien suba desesperadamente para intentar detenerla y evitar una tragedia. ¿Logrará convencerla a tiempo?
En paralelo, en el Palacio de los Luján, el servicio espera el regreso de los señores tras el bautizo, pero su ausencia comienza a generar preocupación. Se informa que la Guardia Civil ha sido llamada para intervenir ante la amenaza armada de Eugenia.
Por otro lado, se produce un giro inesperado cuando Catalina ordena el despido de Petra Arcos, a quien culpa indirectamente de la excomunión del padre Samuel. Esto desata tensiones con Leocadia, quien se molesta al no haber sido consultada y reclama su autoridad como figura dominante en el palacio.
También veremos una evolución en la relación entre Martina y su prometido San Jacobo, que parece deteriorarse cada vez más. San Jacobo, mediante un chantaje emocional, se ausenta del bautizo, alegando que no quiere aparecer en una foto con una mujer con la que quizá no se case. Su actitud manipuladora evidencia una dinámica tóxica que empieza a pasar factura a Martina.
En cuanto al joven Manuel, su ingenuidad vuelve a jugarle en contra. A pesar de que Toño le robó dinero y su coche, Manuel decide ayudarle pagando sus deudas. Para ello, solicita más fondos a Leocadia bajo el pretexto de invertir en su negocio. Ella accede, pero con una condición: quedarse con la mayoría del negocio. Así, Manuel termina cediendo el control de su emprendimiento, todo por ayudar a quien claramente no lo merece.
El episodio se perfila como uno de los más cargados de emoción y consecuencias de la temporada. Las decisiones impulsivas, las traiciones y las emociones a flor de piel prometen mantener a los espectadores al borde del asiento.