¡Llegó el viernes y con él un nuevo adelanto de lo que nos espera la próxima semana en La Promesa! Como siempre, te traemos una pequeña dosis de intriga y emoción antes del avance completo del domingo. Aquí van los detalles más jugosos (alerta de spoilers):

La semana arranca con una gran sorpresa cortesía de Lisandro, quien entrega un misterioso obsequio que deja perplejos tanto a Adriano como a Catalina. La naturaleza del regalo es tan desconcertante que ambos quedan sin palabras, sin saber si interpretarlo como un gesto amable o una maniobra enigmática con segundas intenciones.

Por otro lado, Emilia vive un momento de felicidad al enterarse de que Rómulo ha decidido abandonar La Promesa para marcharse con ella. La decisión del mayordomo viene acompañada de una solicitud muy clara: la mayor discreción posible. Sin embargo, mantenerlo en secreto resulta complicado, y el resto del servicio no tarda en descubrirlo, generando revuelo entre los trabajadores.

Mientras tanto, Leocadia logra finalmente su cometido: separar a Ángela de Curro y forzarla a marcharse a Zúrich para retomar sus estudios. Lo que la señora no anticipa es la determinación de la joven, quien decide no obedecer sus órdenes y opta por esconderse en los terrenos de la finca. Su fuga improvisada pone en riesgo tanto a ella como a Curro, y la amenaza de Leocadia no se hace esperar: o cooperan o ambos se quedarán sin empleo.

En medio de esta tensión, Martina se muestra desafiante y, a pesar de las restricciones, decide visitar a escondidas a Ángela. Su actitud rebelde pone en evidencia la solidez de su vínculo con la joven, a la vez que tensa aún más su ya complicada relación con Jacobo. Martina, cansada de la frialdad y la incomprensión del joven, da por terminada la relación definitivamente.

En cuanto a Samuel, su caso sigue generando debate. María Fernández lo presiona intensamente para que revele públicamente lo que le confesó en privado. El sacerdote se ve atrapado entre sus obligaciones religiosas y la presión social, mientras Leocadia, una vez más, interviene para protegerlo: le exige que permanezca en La Promesa y que oculte su excomunión al duque, lo que añade una nueva capa de tensión a su permanencia en la finca.

En paralelo, Manuel responde por carta a la persona interesada en la compra de los motores, aceptando la oferta. Esta decisión marca un nuevo rumbo para el joven, quien también comparte con Simona una emotiva visita al cementerio de Hann. No obstante, tanto él como Toño descubren que alguien ha vuelto a husmear en el hangar, removiendo objetos sin permiso. Esta situación pone en alerta a ambos y reaviva las sospechas sobre posibles traiciones o conspiraciones dentro de la finca.

Las investigaciones en torno al estuche de la pulsera continúan, lideradas por Curro, Pía y Luján. Tras analizar su contenido, confirman que contenía cianuro, lo que los empuja a planear una visita encubierta a la joyería para obtener más información. Curro se ofrece voluntariamente para la misión, pero sus verdaderas intenciones van más allá: busca reencontrarse con Esmeralda, la dependienta. Este encuentro clandestino, sin embargo, podría costarle caro, ya que un error de cálculo pondrá su vida (o al menos su seguridad) en grave peligro.

Por su parte, Ángela sigue escondida en los jardines del palacio, pero su plan improvisado enfrenta obstáculos cada vez mayores. La joven, decidida a no abandonar el lugar, enfrenta día tras día más complicaciones. En un intento por mediar, Lorenzo interviene en el conflicto entre madre e hija, y trata de suavizar la postura de Leocadia, destacando la determinación y el carácter de Ángela. A pesar de sus esfuerzos, el conflicto familiar sigue escalando.

Uno de los momentos más significativos de la semana es la creciente notoriedad de la inminente marcha de Rómulo. Aunque intentó mantener su decisión en secreto, su partida comienza a notarse, especialmente entre el personal del servicio, que empieza a especular y a inquietarse por lo que eso podría significar para la dinámica interna de La Promesa. Sin embargo, no todos se resignan a dejarlo ir. Una figura importante de la planta noble logra anticipar sus intenciones y se adelanta para intentar evitar su salida. Este intento de retención podría desencadenar nuevas alianzas o enfrentamientos dentro de la casa.

La próxima semana en La Promesa estará repleta de emociones, revelaciones y decisiones críticas que afectarán tanto a los personajes más queridos como a aquellos cuya lealtad aún está por definirse. Las relaciones sentimentales se tambalean, los secretos amenazan con salir a la luz y los conflictos de poder dentro de la finca alcanzan un nuevo nivel de intensidad.

No te pierdas ninguno de los episodios, porque cada día traerá una nueva vuelta de tuerca en esta historia que no deja de sorprendernos. Y como siempre, el domingo llega el avance completo para los más impacientes.

¡Nos leemos en comentarios!
Y recuerda: La Promesa guarda muchos secretos… y no todos están enterrados en el pasado.