En los últimos capítulos de ‘Sueños de libertad’, Jesús tiene un enfrentamiento con Digna. El futuro de Jesús acaba drásticamente con su muerte. Gema revela a Begoña que María ha desaparecido tras secuestrar un bebé de la casa cuna, lo que añade un nuevo y oscuro giro a los acontecimientos. Mientras los empleados se muestran desconcertados por la renuncia de Joaquín, don Pedro, ahora al mando como director, no tarda en hacer gala de su nuevo poder. Su autoridad se impone con firmeza, pero no todos lo reciben con agrado. Tasio, al enterarse de la decisión de don Pedro de devolverlo a su antiguo puesto, se siente traicionado y despojado de su posición, lo que solo alimenta su resentimiento.
Marta se impone a don Pedro en ‘Sueños de libertad’
Tras el incidente con el bebé y la amenaza de denuncia que se cierne sobre María, Andrés decide tomar medidas para protegerla. Sabedor de las repercusiones, se enfrenta a una situación cada vez más difícil, luchando por salvaguardar su futuro en medio de la creciente tensión. Mientras tanto, las chicas de la tienda se encuentran con serias dudas sobre su apoyo a Carmen, especialmente ahora que el proyecto carece de los recursos financieros necesarios. La falta de dinero pone en jaque el sueño de muchas de ellas, obligándolas a replantearse si seguirán adelante con sus planes.
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Pelayo, por su parte, recibe una llamada incómoda de alguien de su pasado. La conversación deja una sensación de inquietud, pero decide ocultárselo a los demás, temeroso de las consecuencias que pueda acarrear este reencuentro inesperado. Tras la muerte de Jesús, Begoña se siente cada vez más insegura acerca de su lugar en casa De la Reina. Su futuro en la empresa parece incierto, y la presión por mantener su posición aumenta. Marta, por su parte, se da cuenta de la importancia de su voz en las decisiones que toma don Pedro, entendiendo ahora el poder que tiene en sus manos.
Begoña y Andrés disfrutan de un momento de cercanía en ‘Sueños de libertad’
Mientras Irene y Fermín se acercan más, compartiendo secretos y descubriendo lo que tienen en común, Digna, al decidir abandonar su puesto en casa De la Reina, se pregunta quién asumirá las responsabilidades que ella deja atrás. Gema y Joaquín no logran ponerse de acuerdo sobre la gestión de don Pedro, y su discusión, aunque inicialmente centrada en el tema laboral, pronto se desvía hacia otros caminos personales. A pesar del distanciamiento en su relación, Begoña y Andrés disfrutan de un momento de cercanía inesperada, mostrando que, a pesar de todo, aún hay algo que los une en medio del caos.