En el próximo y explosivo capítulo de La Promesa, se desata el momento más esperado por muchos: la caída de Leocadia. Tras semanas de investigación secreta, seguimientos, alianzas inesperadas y pruebas ocultas, Curro, Lope y Ángela finalmente consiguen la clave que puede cambiarlo todo… y la verdad por fin saldrá a la luz, directa al corazón de la familia Luján.

Todo comienza con el regreso sigiloso de Curro desde Valladolid. Agitado, cubierto de polvo y con una mirada cargada de determinación, entra en La Promesa por la puerta trasera. No hay tiempo que perder. Sube directo al cuarto de Pía, quien al verlo tan alterado sabe que algo importante está por ocurrir. Curro le confiesa que en el antiguo casino que frecuentaba Lorenzo ha encontrado documentos que vinculan pagos de joyas costosas, hechos a nombre de Cruz Esquerdo… pero financiados por Lorenzo de la Mata. Y no solo eso: todo indica que Leocadia también estuvo implicada.

El plan que sigue es arriesgado. Curro y Lope deben regresar a la joyería en Valladolid, donde podrían conseguir pruebas clave. Pero para lograrlo, necesitan que Ángela distraiga a su madre. La joven, decidida a enfrentarse a su propio pasado, finge un gesto cariñoso y logra convencer a Leocadia de salir con ella a tomar el té, lejos del palacio, activando así el momento perfecto para que los chicos se infiltren en la tienda.

Mientras Leocadia charla despreocupadamente sobre sus gustos y joyas favoritas sin saber que se está cavando su propia tumba, Curro y Lope acceden discretamente a los archivos de la joyería. Allí, encuentran recibos de transacciones firmadas por Lorenzo, que pagó joyas entregadas a nombre de Cruz justo días antes del atentado a Hann. El giro más impactante viene cuando una empleada llamada Milagros revela un documento olvidado que liga directamente a Leocadia con una de esas compras: una esmeralda adquirida por Lorenzo pero indicada por la mismísima Leocadia. Esa es la prueba que necesitaban.

Curro guarda el documento como oro en paño. A su regreso, se lo muestra a Pía, quien, conmocionada, ve en ese papel la salvación de Cruz y el principio del fin para los verdaderos culpables. Pero lo que no sabían era que Petra escuchaba todo desde la puerta. Curro la confronta: si avisa a Lorenzo o a Leocadia, se enfrentará a consecuencias como nunca antes.

Esa misma noche, durante una cena solemne en el salón del palacio, todos los implicados están presentes. Curro, con el porte de un simple sirviente, sirve vino en silencio… hasta que rompe el protocolo. Pide la palabra. Y lo que sucede a continuación quedará grabado como uno de los momentos más tensos en la historia de La Promesa.

Con calma calculada, Curro se dirige al centro de la mesa, saca un sobre cuidadosamente doblado de su chaqueta y, ante los ojos atónitos de los presentes, lo abre. El documento expuesto detalla las transacciones, los pagos, las firmas… y la implicación directa de Lorenzo y Leocadia en una conspiración para incriminar a Cruz. Leocadia palidece. Lorenzo intenta restarle importancia. Pero es demasiado tarde: la verdad está sobre la mesa, y esta vez no hay escapatoria posible.

El silencio se vuelve insoportable. Nadie respira. Alonso mira el papel, luego a Leocadia, y finalmente a Lorenzo. Catalina, Adriano y Ángela apenas contienen la conmoción. Lo que viene después solo puede ser justicia.

Pero esto es solo el comienzo. ¿Qué hará Alonso ahora que conoce la verdad? ¿Cómo reaccionará Leocadia cuando se dé cuenta de que ha sido vencida por un simple “criado”? ¿Y qué nuevas alianzas nacerán de esta revelación que cambia el destino de todos en La Promesa?

No te pierdas este episodio imperdible, donde la venganza, la justicia y la verdad se entrelazan para dar el golpe final que tanto tiempo llevábamos esperando.