Esta semana en ‘Una nueva vida’, Halis da la bienvenida a Suna a la familia. “Suna, ahora eres mi nieta, nuera de los Korhan, nuestro nuevo tesoro. Felicidades, yo espero que vuestro matrimonio sea fuerte y que os mantengáis siempre unidos”, dice Halis, colocando los anillos a la pareja. Así, da por concluida la pedida de mano y Suna se muestra entusiasmada con la idea de casarse. Pero su alegría dura poco, pues Nuket, cruel y despiadada, le confiesa que Kaya nunca ha querido casarse: “Eres patética, no te quiere, solo quiere vengarse de la gente de esta mansión por todo el daño que le hicieron y te utilizará como un peón”.

Al principio, Suna se niega a creerle, pero una charla entre Nuket y Kaya lo cambiará todo. Y es que el chico le confiesa a su madre que “Suna no me gusta. Cuando miro a esa chica solo siento lástima pero, ¿qué puedo hacer? Esto estaba en mi destino, pobrecita, es una niña herida. Quizás por eso teníamos que conocernos, a mí los Korhan también me dieron de lado”. Suna, que ha escuchado la conversación desde la puerta, se encierra en su habitación con un fuerte ataque de ansiedad e incapaz de aguantar las lágrimas.

Taylan es secuestrado en ‘Una nueva vida’

Tras lo visto en el capítulo 45 de ‘Una nueva vida’ Ifakat avisa a Ferit: “Si le cuentas a Seyran que Pelin está embarazada, la perderás para siempre”. El chico insiste en que su esposa se mostrará comprensiva y querrá a su hijo tanto como él, pero Ifakat no lo tiene tan claro. Ferit entra en la habitación y abraza con todas sus fuerzas a Seyran, quien le pide que “no vuelva a separarse de ella”. Taylan ha sido secuestrado por los hombres de Ferit. El periodista amenaza a Abidin con la noticia que podría destruir al clan Korhan: “Sé que Pelin está embarazada, tengo fotografías de los dos saliendo de la clínica, o me liberas o toda Estambul descubrirá la verdad sobre tu querido jefe”.

Seyran hace un descubrimiento en ‘Una nueva vida’

Para evitar que Sehmuz prohíba a Ferit conocer a su hijo, Halis decide visitar su mansión para hacerle entrar en razón, pero el tío de Pelin es tajante: “Tu nieto se divorciará y se casará con mi sobrina, si esto no sucede, olvídate del niño, no será tuyo jamás. Casaré a Pelin con Ali, mi chófer, tendrá su apellido y crecerá con un padre y una madre”. Halis, furioso, se levanta y afirma que “nuestra sangre corre por las venas de este niño y nadie nos lo puede quitar, si haces alguna estupidez haré lo que tengo que hacer y no me temblará el pulso”. Finalmente, Seyran sigue hasta su casa a la joven que asegura ser la amante de Ferit. Pero cuando llega a la mansión de Sehmuz, se queda de piedra: las estanterías están repletas de fotografías en las que aparece Pelin. Así, Seyran confirma sus pesquisas: Pelin lo ha organizado todo para separarles.