En un giro inesperado de los acontecimientos, Damían se ve envuelto en una peligrosa situación donde logra descubrir un detalle crucial sobre Apelayó. En un momento de gran tensión, Damían intercepta a Apelayó en un lugar solitario, justo cuando este parece estar ocultando algo muy importante. Sin darse cuenta de la presencia de Damían, Apelayó se muestra nervioso y se ve obligado a enfrentar las consecuencias de sus actos. La mirada de Damían, llena de determinación, revela que sabe más de lo que Apelayó esperaba. Es en ese preciso instante cuando Apelayó se da cuenta de que ha sido atrapado, y el miedo comienza a dominar su rostro, pues sabe que cualquier movimiento en falso podría desatar una serie de eventos catastróficos para él.
A lo largo del tenso intercambio, Damían aprovecha la oportunidad para presionar a Apelayó, forzándolo a revelar información clave que podría cambiar el rumbo de toda la historia. La situación se torna aún más compleja cuando Apelayó intenta escapar, pero las pruebas ya están a su favor, y Damían está decidido a no dejarlo ir tan fácilmente. La tensión crece conforme los secretos salen a la luz, y todo parece indicar que este encuentro marcará un punto de no retorno para ambos. Con su ingenio y coraje, Damían demuestra que está dispuesto a todo para obtener la justicia que busca, mientras Apelayó comienza a sentirse acorralado como nunca antes.