escándalo, la valentía y el derrumbe de un plan siniestro. Todo comienza cuando Manuel recibe una carta sospechosa, supuestamente escrita por su madre, instándolo a casarse con la hija del poderoso Duque de Carvajal y Salcedo. Sin embargo, su contenido dulce y manipulador no encaja con el estilo directo y cruel de la Marquesa, lo que despierta las sospechas de Manuel y del fiel mayordomo Rómulo. Pronto, descubren que la misiva podría ser parte de un elaborado engaño con fines oscuros.
La fiesta que debía unir a las casas de Luján y Carvajal es en realidad una trampa: el Duque busca asegurar su dominio sobre La Promesa mediante un matrimonio forzado, encubriendo un chantaje basado en deudas y una alianza secreta con Lorenzo. Mientras tanto, el servicio del palacio se desestabiliza con el regreso de Petra, quien intenta retomar el control y crear caos bajo la apariencia de eficiencia, enfrentándose directamente a Pía.
Fuera del salón, Lope y Vera emprenden una misión peligrosa para descubrir la verdad. Gracias a un plano heredado del padre de Vera, se infiltran en la mansión del Duque, donde descubren documentos comprometedores que revelan el chantaje a los Marqueses de Luján y el secuestro de una joven como “garantía” del trato. En un sótano oculto, encuentran a Esmeralda, viva pero debilitada, revelando que Lorenzo la entregó al Duque como rehén para sellar el acuerdo.
Mientras tanto, en La Promesa, Curro enfrenta directamente a Lorenzo, acusándolo de abuso y de estar involucrado en la desaparición de Esmeralda. La tensión crece mientras se acercan a la celebración del compromiso. Con la verdad en sus manos y el valor de los justos, Curro, Pía y Ángela irrumpen en la fiesta y exponen públicamente la conspiración. El clímax llega cuando Lope y Vera regresan con Esmeralda y el libro de contabilidad del Duque, en el que se detalla la manipulación financiera y el acuerdo fraudulento de la boda.
El salón estalla en caos: los invitados huyen, Inés abofetea a su padre, el Duque queda deshonrado y Lorenzo es confinado. Petra, viendo que su posición ya no tiene respaldo, abandona el palacio al amanecer. Pía es reafirmada como ama de llaves, con la lealtad total del personal.
Con la amenaza eliminada, La Promesa respira de nuevo. Curro promete proteger a Ángela, y Lope y Vera se entregan a un amor nacido del coraje. Manuel, liberado de un matrimonio que no desea, se permite soñar con un futuro en libertad… quizás al lado de Jana. El palacio, tras sobrevivir a una noche de traiciones y valentía, se prepara para renacer con esperanza.